Acompáñanos a través de este artículo para comprender mejor las causas principales por los que muchas veces caemos en la procrastinación, aprender estrategias efectivas y así vencer el mal hábito de la postergación. Aprendiendo a dejar de procrastinar lograrás vencer cualquier obstáculo y ser mucho más productivo.
¿Qué es la Procrastinación?
Entendiendo ese Enemigo Interior
Seguramente te ha pasado muchas veces que te sientes frustrado y te preguntes: ¿por qué no puedo hacer las cosas?
Para comenzar, es bueno aclarar que la procrastinación es el mal hábito de posponer tareas y obligaciones importantes, eligiendo en su lugar, distracciones menos relevantes y mucho más tentadoras.
Y es que procrastinar, es por decirlo así, escuchar esa vocecita interior que nos dice «lo haré después» y que nos aleja de cumplir a tiempo con nuestras responsabilidades.
Para muchos de nosotros, esto puede ser un hábito persistente y una barrera para lograr todos nuestros objetivos y ser mucho más productivos.
10 Causas principales de la Procrastinación
Identificando los Obstáculos
Caer en este mal hábito de la procrastinación no tiene que sorprenderte, pues es un fenómeno común que afecta a muchas personas en diferentes aspectos de sus vidas.
Y es que, a diferencia de lo que muchos piensan, la pereza no suele ser la razón detrás de la procrastinación, explicó Jenny Yip, psicóloga clínica y directora ejecutiva del Little Thinkers Center, con sede en Los Ángeles. Ella dice: La pereza es algo como: «No tengo absolutamente ningún deseo de pensar en esto». La procrastinación es: «Me molesta pensar en esto. Y, por tanto, me cuesta hacer el trabajo«. Es una gran diferencia.
De manera que hay varias razones psicológicas y emocionales que pueden llevarnos a caer en este mal hábito. Veamos algunos factores principales que están detrás de ello.
Miedo al fracaso o al éxito: en ocasiones, posponemos tareas porque tenemos miedo de no estar a la altura o de enfrentar las expectativas que conlleva el éxito.
Falta de motivación o interés: cuando no nos sentimos motivados o interesados en una tarea, tendemos a postergarla a cambio de actividades más agradables o estimulantes.
Perfeccionismo: el deseo de hacer todo perfecto puede llevarnos a evitar empezar una tarea si creemos que no podemos alcanzar nuestros propios estándares.
Dificultad para empezar: a veces, la tarea de comenzar una actividad puede ser abrumadora, lo que nos lleva a postergarla indefinidamente.
Falta de claridad en los objetivos: si no tenemos objetivos claros o no sabemos por dónde empezar, es más probable que evitemos o posterguemos las obligaciones.
Distracciones y tentaciones: las distracciones en el entorno, como redes sociales o televisión, pueden hacer que desviemos nuestra atención de las tareas más importantes.
Exceso de carga de trabajo: sentirnos cargados por una gran cantidad de tareas, puede llevarnos a procrastinar, ya que no sabemos por dónde empezar.
Baja tolerancia al aburrimiento o frustración: si una tarea es aburrida o desafiante, podemos procrastinar para evitar enfrentar sentimientos negativos.
Falta de recompensas inmediatas: si la realización de una tarea no ofrece una recompensa inmediata, es más probable que la posterguemos en busca de actividades más gratificantes.
Dependencia de la presión de tiempo: algunas personas se sienten más motivadas cuando se enfrentan a una fecha límite cercana, lo que puede llevar a procrastinar hasta el último momento.
Teniendo en cuenta todos estos factores que pueden llevarnos a posponer de cumplir con nuestras responsabilidades a tiempo, analicemos cómo podemos dejar de procrastinar y lograr cumplir con todos nuestros objetivos.
Dejar de procastinar y lograr ser más productivos es posible con algo de empeño y determinación de tu parte. De manera que seguir las siguientes sugerencias podría resultarte útil para lograrlo.
Establece Objetivos Claros y Realistas
Sin objetivos claros, es fácil perderse en la procrastinación. Por tanto, define metas específicas y alcanzables para mantenerte enfocado en cumplir con tus responsabilidades.
También podría ser muy útil, dividir tus objetivos en tareas más pequeñas y asignar plazos de tiempo realistas para completarlas.
Celebrar tus logros, incluso los más pequeños, te ayudará a mantenerte comprometido y motivado con todo lo que hagas.
Adopta la Técnica de «Dos Minutos»
Cuando sientas la tentación de posponer una tarea, utiliza la regla de «dos minutos». Esta regla implica que si una tarea puede realizarse en dos minutos o menos, lo mejor es hacerla de inmediato.
Esta técnica evita que pequeñas tareas se acumulen y se conviertan en obstáculos para tu productividad y trabajo eficaz.
Domina el Arte de la Gestión del Tiempo
El manejo eficiente del tiempo, es esencial para vencer la procrastinación. Para lograrlo, puedes probar métodos como la técnica Pomodoro, donde trabajas en bloques de tiempo y haces pausas cortas, con el fin de mantener la concentración y evitar la fatiga mental.
Planifica tu día con una lista de tareas priorizadas y esfuérzate por lograr una tarea a la vez.
Elimina las Distracciones:
El entorno en el que trabajas puede tener un gran impacto en tu capacidad para concentrarte. Por tanto, identifica las distracciones que te rodean y busca maneras de eliminarlas o minimizar su influencia.
Como por ejemplo, intenta apagar las notificaciones del teléfono, crear un espacio de trabajo organizado y silenciar las redes sociales durante tus períodos de trabajo.
Encuentra tu propia Motivación Personal
Conecta tus tareas con tus objetivos personales y profesionales. Visualiza los beneficios que obtendrás al completar una tarea y utiliza esa motivación como combustible para mantener la concentración.
Aprende a Delegar
No tengas miedo de pedir ayuda o delegar tareas si te sientes abrumado. A veces, compartir responsabilidades puede liberar tiempo y energía para que te concentres en tareas más importantes. Por lo tanto, acepta que no puedes hacerlo todo y busca apoyo en tus colegas o familiares cuando sea necesario.
No te Desanimes
Todos cometemos errores y enfrentamos momentos de falta de motivación. No te castigues por procrastinar ocasionalmente; en su lugar, sé amable contigo mismo. Aprende de tus errores, perdónate y sigue adelante con una nueva determinación.
Ahora te compartimos algunos recursos online que te serán muy útiles para desarrollar mejores habilidades y así vencer el al hábito de postergar siempre las cosas hasta el último momento.
Cursos útiles para vencer la Procrastinación
Aquí tienes algunas recomendaciones de algunos cursos en línea que pueden ayudarte a vencer la procrastinación con éxito.
Cursos en línea:
Curso de Productividad Personal en Udemy: este curso proporciona técnicas y estrategias para mejorar la productividad, manejar el tiempo de manera efectiva y vencer la procrastinación.
Curso de Gestión del Tiempo y Productividad en Coursera: a través de este curso, aprenderás a establecer objetivos, planificar tareas y evitar la procrastinación para ser más efectivo en tu trabajo.
Curso de Superación Personal en Crehana: este curso abarca temas como el control emocional, la gestión del tiempo y la motivación para ayudarte a superar la procrastinación y alcanzar tus metas.
Curso de Hábitos Diarios en Domestika: aunque no se centra específicamente en procrastinación, este curso se enfoca en crear hábitos diarios positivos que pueden ayudarte a superar la postergación.
Curso de Productividad para Freelancers en Platzi: diseñado especialmente para freelancers y trabajadores remotos, estos cursos ofrecen herramientas y consejos para aumentar la productividad y evitar la procrastinación.
Recuerda que para dejar de procrastinar, se requiere compromiso y disciplina.
Estos cursos te proporcionarán herramientas y conocimientos para comenzar, pero recuerda que la clave está en aplicar lo aprendido en tu vida diaria.
Hábitos Saludables para ser más Productivo
Ten en cuenta que utilizar herramientas y aplicaciones para automatizar tareas repetitivas nos permitirá enfocarnos en actividades más importantes.
También es fundamental descansar adecuadamente, hacer ejercicio y mantener una dieta saludable para mantener nuestra energía y buen estado físico y mental.
Por último, definir horarios de trabajo y establecer límites entre el trabajo y la vida personal nos ayudará a mantener en equilibrio.
CONCLUSIÓN
Queridos camelladores remoto, la procrastinación es un enemigo común, pero no invencible. Al identificar sus causas y adoptar estrategias efectivas, podemos no solo dejar de procastinar y lograr ser más productivos, sino que también liberarnos de sus efectos adversos y alcanzar nuestro máximo potencial en el trabajo remoto.
